Con nuevo material escrito solo para este libro y adaptaciones de su clásico, Gracia divina vs. condena humana, el exitoso autor Philip Yancey presenta una mirada única al perdón: lo que es... por qué es tan difícil... por qué tenemos que elegir este acto antinatural y escandaloso... y por qué debemos acercarnos a Dios una y otra vez, entregándole el residuo de lo que pensamos que le habíamos confiado hace mucho tiempo.
El perdón es un acto antinatural. Tal vez por eso el perdón es tan difícil. Entonces, por qué iba Dios a exigirnos un acto que desafía todo instinto primal? Qué hace que el perdón sea tan importante como para que sea un elemento central de la fe cristiana? Lo hacemos porque el Evangelio deja clara la conexión: Dios perdona nuestras deudas como nosotros perdonamos a nuestros deudores. Lo contrario también es cierto: solo viviendo en la corriente del perdón de Dios encontraremos la fuerza para responder con perdón a los demás.
Podemos hablar de perdón a menudo, incluso creyendo que somos una persona que perdona, pero entendemos la verdadera profundidad y lo que exige de nosotros? Lo proclama nuestra vida con tanta fuerza como nuestras palabras? No debemos hacernos ilusiones sobre el perdón, ya que puede ser el acto más exigente en las relaciones humanas, lo más difícil que jamás hayamos hecho. Pero para cualquiera que vive y ama imperfectamente, en otras palabras, para todos nosotros, el perdón ofrece una alternativa a un ciclo interminable de resentimiento y venganza.
Solo eso puede liberarnos. Los cristianos pueden y deben revelar el perdón que el mundo busca. Un cese al fuego entre los seres humanos comienza con el perdón: el comienzo y el final de la gracia.
The Scandal of Forgiveness
Containing new material written just for this book and adaptations from his classic, What's So Amazing About Grace, bestselling author Philip Yancey presents a one of a kind look at forgiveness: what it is... why it is so difficult... why we have to choose this unnatural, scandalous act... and why we must approach God again and again, yielding to Him the residue of what we thought we had committed to him long ago.
Forgiveness is an unnatural act. That may be why forgiveness is so difficult. So why would God require us to perform an act that defies every primal instinct? What makes forgiveness so important that it is central to the Christian faith? We do so because the Gospel makes clear the connection: God forgives our debts as we forgive our debtors. The reverse is also true: only by living in the stream of God's forgiveness will we find the strength to respond with forgiveness toward others.
We may speak of forgiveness often, even believing that we are a forgiving person, but do we understand the true depth of it and what it demands of us? Does our life proclaim it as powerfully as our words? We should have no illusions about forgiveness, for it may be the most demanding act in human relationships, the hardest thing we ever do. But for anyone who lives and loves imperfectly--in other words, for all of us --forgiveness offers an alternative to an endless cycle of resentment and revenge.
It alone can set us free. Christians can and must reveal the forgiveness the world is searching for. A cease-fire between human being starts with forgiveness--the beginning and ending of grace.
