La traici n los separ Amelia Greystone estaba enamorada del conde de St. Just, pero l rompi su noviazgo y se march repentinamente de Cornualles. Diez a os despu s, ella se qued asombrada cuando Simon, que acababa de enviudar, volvi a la mansi n de su familia. Amelia deb a olvidar su amor y su traici n, y consolarlo como har a una buena vecina. Simon hab a cambiado mucho; se hab a convertido en un hombre adusto y angustiado. Sin embargo, segu a teniendo el poder de cautivarla con una sola mirada. l le ofreci un puesto de trabajo de ama de llaves en su casa y, al instante, Amelia supo que deb a rechazarlo. Pero, por el bien de los hijos peque os del conde, hizo caso omiso de los dictados del sentido com n... La pasi n los unir a de nuevo Simon Grenville era un esp a brit nico, pero se vio obligado a hacer un doble juego con tal de mantener seguros a sus hijos, su principal objetivo. Cuando se vio cara a cara con la mujer a la que hab a amado una vez, se dio cuenta de que sus sentimientos hacia Amelia no hab an cambiado, sino que se hab an fortalecido con el tiempo. Sab a que deb a estar lejos de ella, porque su vida era demasiado peligrosa, pero algunas veces, la pasi n era demasiado fuerte como para negarla... Joyce sobresale a la hora de inventar giros inesperados en las vidas de sus personajes Publishers Weekly